EL ARTE DE RESPIRAR BIEN

A pesar de que la respiración es un acto involuntario e imprescindible, respiramos mal, utilizando mínimamente la capacidad total de nuestros pulmones.

Sin duda, respirar bien es fuente de salud porque fortalece la vitalidad del cuerpo y la mente, estimulando un eficiente funcionamiento de todo el organismo. Los beneficios asociados a una respiración correcta y profunda son:

• A través de los movimientos que provocan los ejercicios de respiración profunda, los órganos abdominales (estómago, intestino, hígado y páncreas) reciben un masaje, al igual que el corazón, gracias al movimiento de la parte superior. Ello estimula la circulación sanguínea de todos estos órganos con el consiguiente alivio en sus cargas de trabajo y el bienestar general del organismo. Lo mismo ocurre con los pulmones, los cuales aumentan su capacidad respiratoria.

• Los órganos digestivos reciben mayor cantidad de oxígeno y, por lo tanto, su funcionamiento es mejor.

• Mejora el funcionamiento del sistema nervioso (cerebro, columna, centros nerviosos y nervios) debido a la mayor oxigenación.

• Relajación y concentración. La respiración lenta, profunda y rítmica provoca una reducción en los latidos del corazón y una relajación muscular, lo cual estimula la tranquilidad mental.

• Combate enfermedades psicoemocionales como la depresión y la ansiedad. Un cerebro y un cuerpo oxigenados son las mejores herramientas para tener una vida plena y duradera.